diciembre 23, 2024

Activación y sanación: el despertar de tu ser interior

La piedra lunar azul, popular por su poder activador, es una gema profundamente nutritiva, sensual y femenina. Posee la asombrosa capacidad de sanar tus heridas y guiarte hacia la plenitud y el bienestar. Es un cristal que encarna profundas energías sanadoras y sagradas femeninas. Sumérgete en este artículo para desentrañar los secretos fascinantes de la piedra lunar azul.

Correspondencias energéticas y fisiológicas

La piedra lunar azul se vincula con los chakras del corazón, la corona y el tercer ojo. Tiene la capacidad de disipar y limpiar las energías negativas de todos tus chakras, brindándote el apoyo esencial para superar los obstáculos.

Adicionalmente, impacta poderosamente el metabolismo, el sistema linfático, el sistema reproductivo femenino y el tracto digestivo. También beneficia la glándula pineal, los biorritmos, la hiperactividad, los ojos, el cabello y la piel.

El poder transformador de la piedra lunar azul

El equilibrio de las polaridades

La piedra lunar azul es conocida por promover el equilibrio entre las cualidades femeninas y masculinas. Te prepara para la integración andrógina y la unión alquímica.

Un puente hacia la conciencia superior

Si eres un principiante en el trabajo con cristales, colocar los tres tipos de piedra lunar (blanca, arcoíris y azul) sucesivamente sobre tu chakra solar te ayudará a elevarte a través de los niveles vibratorios. La piedra lunar azul te guiará hacia la cima de la conciencia multidimensional consciente, permitiéndote experimentar lo presente y lo trascendente simultáneamente.

Consejos para aprovechar el poder de la piedra lunar azul

  • Coloca una piedra lunar azul en la parte posterior de tu cuello durante 10 minutos para aumentar el flujo sanguíneo al cerebro y relajar la tensión muscular.
  • Combina la piedra lunar azul con otras piedras como sunstone, vanadinita, angelita y cuarzo anfibol para potenciar tus habilidades y dones psíquicos.
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Conclusión

La piedra lunar azul es un tesoro cristalino que guarda un poder transformador. Cuídala adecuadamente, límpiala con regularidad y mantenla alejada de la luz solar intensa para preservar su energía vibrante. Al conectarte con la piedra lunar azul, establecerás una conexión significativa y duradera con este excepcional cristal.


Propiedades de la Piedra Luna Azul

Activa y nutre
Sensual y femenina
Sana y restablece la integridad
Transporta energías sagradas femeninas

Correspondencia de Chakras

Chakra del corazón
Chakra de la corona
Tercer ojo

Correspondencia Fisiológica

Metabolismo
Sistema linfático
Sistema reproductivo femenino
Tracto digestivo
Glándula pineal
Biorritmos
Hiperactividad
Ojos, cabello y piel

Vibraciones

Altas vibraciones

Leyenda del Poder de la Piedra Luna Azul

Relacionada con la luna
Estimula las capacidades metafísicas
Asociada con la diosa romana de la luna, Diana
Se dice que cambia según las fases de la luna
Considerada un amuleto de amor durante la luna creciente
Se creía que permitía al portador percibir el futuro
Asociada con el arcángel Gabriel

Poder Curativo

Calma el alma
Regula la menopausia y la menstruación
Equilibra el sistema reproductivo femenino
Facilita la absorción de nutrientes
Trata la retención de líquidos
Equilibra las hormonas
Beneficioso para niños y adolescentes
Alivia las enfermedades degenerativas del cabello, los ojos y la piel

Poder Transformador

Transforma los malentendidos en espíritu profundo
Despierta el potencial espiritual
Activa la conciencia expandida
Trae un equilibrio de energías femeninas y masculinas

Cómo Aprovechar los Poderes

Colocar una piedra luna azul en la parte posterior del cuello durante 10 minutos para mejorar el flujo sanguíneo y relajar los músculos.
Combinar con otros cristales como sunstone, vanadinita, angelita y cuarzo anfibol para mejorar las habilidades psíquicas.

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Conclusión

Es importante limpiar y proteger la piedra luna azul para mantener su energía constante.
Recargar bajo la luz de la luna es un método eficaz.
El cuidado adecuado garantiza una conexión significativa con el cristal durante muchos años.