La amatista es conocida por su estrecha relación con el chakra corona, el chakra de la espiritualidad. Esta piedra también resuena con el chakra del tercer ojo, asociado con la intuición y la percepción extrasensorial.
Correspondencia física
Se cree que la amatista es beneficiosa para las siguientes áreas:
Función endocrina: Regula la producción hormonal
Procesos metabólicos y celulares: Mejora la salud general
Armonización cerebral: Promueve la claridad mental
Piel, sangre e inmunidad: Fortalece los sistemas corporales
Tracto digestivo: Alivia los trastornos psicosomáticos
Transmisión neuronal: Mejora la comunicación entre las células cerebrales
Vibración y propiedades legendarias
La amatista posee una vibración elevada, especialmente las variedades Sirius Amatista, Amatista Elestial, Vera Cruz y Brandenberg. Se cree que esta vibración disipa las enfermedades sutiles.
En la mitología griega, la amatista se asociaba con la diosa Diana, la cazadora. Según la leyenda, cuando el dios del vino, Baco, se enfureció y envió a un tigre para atacar a una ninfa llamada Amatista, ella rezó a Diana por protección. Diana transformó a Amatista en una piedra blanca, pero Baco, arrepentido, derramó vino sobre ella, tiñéndola de púrpura.
Poder curativo
La amatista es un poderoso tranquilizante que puede ayudar a comprender las causas profundas de las adicciones. También se utiliza para aliviar el dolor físico y psicológico, y calmar la ansiedad.
Poder transformador
La amatista abre el tercer ojo y aclara la visión espiritual. Promueve la iluminación y despeja la mente, creando un espacio sagrado para la exploración multidimensional y la meditación.
Para aprovechar los poderes de la amatista, colócala sobre tu cabeza apuntando hacia ti y otra pieza en tu frente apuntando hacia abajo. Siente la paz que irradia por tu cuerpo.
La amatista se puede combinar con otros cristales como aguamarina, turmalina y piedra lunar para amplificar sus efectos.
Información más relevante sobre la amatista:
– Significado literal y espiritual: Serenidad y calma.
– Chakra correspondiente: Corona y tercer ojo.
– Correlación física: Sistema endocrino, procesos metabólicos y celulares, cerebro, piel, sangre, sistema inmunitario, trastornos psicosomáticos, regulación hormonal y transmisión neuronal.
– Vibración: Alta, especialmente en Sirius Amethyst, Amethyst Elestial, Vera Cruz y Brandenberg.
– Poder legendario: Protección contra la embriaguez, sinceridad, poder real.
– Poder curativo: Tranquilizante, ayuda a comprender las adicciones, alivia dolores de cabeza, ansiedad y trastornos psicosomáticos.
– Poder transformador: Abre el tercer ojo, aclara la visión espiritual, disipa ilusiones, ayuda a soñar un mundo nuevo.
– Cómo aprovechar sus poderes: Colocar piezas de amatista sobre la cabeza y la frente.
– Combinaciones de cristales: Aquamarina, turmalina y piedra lunar.
