
Causas de la tensión muscular: desde físicas hasta emocionales
La tensión muscular puede originarse por factores físicos como dolor, mala postura corporal, exceso de trabajo (especialmente si no es habitual) e inflamación. A nivel emocional, cualquier tensión involuntaria derivada de la ansiedad o la presión mental también puede provocar rigidez muscular, así como la concentración intensa durante períodos prolongados, como conducir a alta velocidad durante horas.
De hecho, no es casualidad que los estados psicológicos y emocionales se describan como “tensos” o “estresados” en situaciones apropiadas o cuando se anticipa un acontecimiento o se necesita dar pasos importantes para cambiar algo.
Cristales curativos para la tensión muscular: alivio físico y emocional
Los cristales curativos que pueden ayudar con la tensión muscular no solo ofrecen un efecto relajante en los músculos, sino que también promueven la relajación emocional y psicológica. Su efecto sobre los músculos es tan profundo que incluso las vértebras desplazadas pueden, en ocasiones, volver a su lugar o, al menos, reposicionarse correctamente con la ayuda de las propiedades relajantes de los cristales.
Aquí tienes algunos de los mejores cristales para curar la tensión muscular:
Amatista
Este cristal púrpura ayuda principalmente a aliviar la tensión, especialmente si se utiliza en forma de drusa del tamaño de un platillo para acariciar el cuerpo sin tocarlo, como si se utilizara un cepillo. La drusa de amatista debe moverse desde la frente, pasando por el cuero cabelludo, el cuello, la espalda y las piernas. Continúa haciéndolo sobre los brazos y hasta el suelo.
Las zonas del cuerpo que se consideran especialmente tensas pueden tratarse de esta manera varias veces. Sin embargo, ten en cuenta que si tu presión arterial desciende muy rápidamente debido a este tratamiento y crea una sensación de mareo, necesitas estabilizarte mediante movimientos compensatorios de una drusa de amatista sobre el cuerpo. En otras palabras, debes aplicar trazos en el eje del cuerpo, empezando por el frente y pasando por la cabeza y hacia abajo por la espalda.
También puedes llevar amatista en forma de collar para ayudar a aliviar la tensión muscular y a identificar y negar las causas mentales y emocionales de la tensión.
Magnesita
La magnesita es una piedra de sanación suave que ofrece un efecto relajante en todo el sistema muscular. Puede ayudar a superar el dolor y el miedo, aportando la relajación necesaria.
Puedes colocar una piedra de magnesita pulida sobre las zonas afectadas o llevarla como collar, pulsera o colgante. También puedes tomar de 3 a 7 gotas de esencia de gema de magnesita tres veces al día o preparar 200-300 ml de agua de magnesita para tomar pequeños sorbos a lo largo del día.
Cuarzo ahumado
Este cristal tiene la capacidad de relajar todo el cuerpo. Con sus energías calmantes, ayuda a aliviar la tensión y el estrés. Además, el cuarzo ahumado ayuda a mantener la relajación en momentos difíciles y a reducir cualquier tendencia innata a estresarse.
Solo tienes que sostener dos cristales o piedras pulidas en las manos mientras te permites un par de minutos de descanso. Alternativamente, o como tratamiento complementario, puedes colocar una piedra pulida o un cristal sobre los músculos afectados. Si lo utilizas en forma de cristal, asegúrate de que apunta hacia abajo, hacia las manos o los pies. También puedes llevarlo como colgante, collar o pulsera.
Turmalina
La turmalina de cualquier tipo, especialmente las pequeñas y estrechas, puede ayudar con cualquier tipo de tensión. Este potente cristal puede aliviar los dolores y molestias causados por un músculo tenso, mientras que su energía calmante aporta tranquilidad y relajación. Emocionalmente hablando, la turmalina puede mejorar tu sentido de agilidad y flexibilidad mental.
Solo tienes que colocar los cristales a lo largo del eje de tu cuerpo o a lo largo de tu articulación, asegurándote de que apunten hacia abajo. De esta manera, el flujo de energía se estimulará en las zonas afectadas. En los casos en que las articulaciones también se hayan endurecido por la ansiedad o el estrés, puedes llevar la turmalina como collar, pulsera o colgante.
Consideraciones finales
Como puedes ver, la tensión muscular es algo que no tienes por qué soportar. Con los mejores cristales para curar la tensión muscular, puedes aliviar instantáneamente las molestias y el dolor que estás experimentando. Además de estos cristales curativos, siempre es mejor saber cuándo tomarse un descanso, así como practicar la meditación regular para mejorar la relajación del cuerpo.

Cristales para sanar la tensión muscular:
– Amatista:
– Alivia la tensión, especialmente en forma de drusa
– Se utiliza moviéndola sobre el cuerpo sin tocarlo
– También se puede usar como collar para identificar y negar las causas mentales y emocionales de la tensión
– Magnesita:
– Piedra de sanación suave que relaja todo el sistema muscular
– Ayuda a superar el dolor y el miedo
– Se puede colocar en las zonas afectadas o llevar como collar, pulsera o colgante
– Se puede tomar como esencia de gema o agua de magnesita
– Cuarzo ahumado:
– Relaja todo el cuerpo
– Alivia la tensión y el estrés
– Se puede sostener en las manos o colocar en los músculos afectados
– También se puede llevar como colgante, collar o pulsera
– Turmalina:
– Alivia cualquier tipo de tensión
– Reduce el dolor y la incomodidad
– Promueve la tranquilidad y la relajación
– Se puede colocar a lo largo del eje del cuerpo o las articulaciones
– También se puede llevar como collar, pulsera o colgante