Los dolores de garganta pueden deberse a tensiones en las cuerdas vocales, problemas de tiroides, infecciones (resfriados o amigdalitis) o irritación (tabaquismo). También pueden ser causados por estrés emocional, que se manifiesta como una sensación de nudo en la garganta. Otras causas menos conocidas son la tensión en los músculos del cuello, dislocación de las vértebras cervicales, problemas dentales y alergias, especialmente las alimentarias.
Consejos para prevenir y tratar los dolores de garganta
Ante un dolor de garganta agudo, especialmente si es recurrente, es recomendable una limpieza intestinal y una dieta consciente, evitando la leche de vaca, el azúcar y el consumo excesivo de proteínas animales. En todos los casos, es esencial un diagnóstico médico profesional.
Para prevenir infecciones, es crucial tratarlas en la etapa inicial. Un remedio casero eficaz es enjuagar la boca y los dientes con aceite de girasol orgánico prensado en frío durante 10 a 20 minutos diarios. Escupir el aceite después de su uso y enjuagar bien la boca.
En caso de síntomas febriles generales, el descanso es fundamental. Incluso si no se presentan, es importante cuidarse. Si es necesario permanecer en cama, la afección puede empeorar. Hacer gárgaras con té de tomillo y salvia también puede aliviar el dolor.
El poder de los cristales para aliviar los dolores de garganta
Además de los tratamientos médicos y los remedios caseros, los cristales pueden ayudar a aliviar los síntomas agudos de garganta y abordar las causas subyacentes, especialmente en casos recurrentes.
Cristales recomendados para los dolores de garganta
Amazonita: Alivia dolores de garganta y ronquera causados por tensiones en la mandíbula o las cuerdas vocales, o por la incapacidad de expresar emociones.
Apofilita: Ayuda cuando el dolor de garganta está relacionado con miedos, ansiedad, inseguridad y presión interna.
Aguamarina + Crisocola: La aguamarina alivia el dolor de garganta, la ronquera y la tos seca relacionada con alergias, estrés y problemas de tiroides. La crisocola, por su parte, ayuda con la dificultad para tragar y la inflamación de las amígdalas.
Dumortierita: Alivia las consecuencias de la tensión en la mandíbula, problemas digestivos y oclusión anormal. Emocionalmente, ayuda a superar el miedo, el dolor y el abatimiento.
Ópalo noble: Alivia el dolor de garganta y la tos. También es beneficioso para problemas de deglución causados por infecciones y resfriados.
Fluorita: Calma la garganta irritada, quemada y contraída. Alivia la tos persistente, los problemas de deglución y los dolores causados por irritación, estrés, alergias y sobrecarga del sistema respiratorio y linfático.
Lapislázuli: Este poderoso cristal azul es adecuado para los dolores de garganta causados por ira reprimida o emociones no expresadas. Facilita tragar verdades incómodas y expresarlas con fuerza.
Cristales para curar los dolores de garganta:
– Amazonita: Tensión en la mandíbula, esfuerzo vocal, incapacidad para expresar emociones.
– Apofilita: Miedos, ansiedad, presión interna, inseguridad.
– Aguamarina + Crisocola: Alergias, problemas de tiroides, estrés, dificultad para tragar.
– Crisocola: Garganta áspera, seca y sensible, amígdalas inflamadas, membranas mucosas dañadas.
– Dumortierita: Tensión en la mandíbula, problemas digestivos, miedo, tristeza.
– Ópalo noble: Dolor de garganta, tos, problemas para tragar.
– Fluorita: Garganta irritada, quemada, tos persistente, problemas para tragar, estrés, alergias.
– Lapislázuli: Ira reprimida, dificultades para expresar emociones, tensión vocal.
