¿Estás buscando un artículo donde puedas encontrar los mejores cristales para curar escaras? Si es así, entonces estás en el lugar correcto.
Las escaras son daños dolorosos en áreas de la piel. Son causadas por la interrupción de la circulación y la presión, que, en un estado avanzado, también pueden alcanzar las capas de tejido más profundas hasta los huesos.
Las escaras son frecuentes en pacientes que tienen que permanecer en cama durante largos periodos y que no pueden darse la vuelta por sí mismos. Si esta afección se deja sin el tratamiento adecuado antes de que penetre en los tejidos más profundos y en los huesos, puede causar un dolor insoportable.
Las escaras se clasifican en una progresión de 4 etapas en la que el proceso general afecta al tejido que está mal nutrido y empieza a morir.
El primer grado implica un enrojecimiento localizado de los tejidos y la piel. El segundo grado es la formación de ampollas. Luego progresa al tercer grado en el que se producen heridas abiertas profundas. Por último, las escaras de cuarto grado provocan inflamación de la médula ósea.
Sin embargo, las escaras no se producen sólo por estar tumbado demasiado tiempo. También hay factores agravantes que incluyen:
Bajo peso, que proporciona muy poco acolchado natural
Sobrepeso, que provoca demasiada presión
Humedad
Tendencia a la acumulación de líquidos o edema
Estar tumbado en posiciones incorrectas
Diabetes
Anemia
Alta temperatura
Hay varias maneras de ayudar a tratar y curar las escaras, desde la posición correcta para tumbarse hasta llevar una dieta equilibrada. Además, dependiendo del alcance y la gravedad de las escaras, la curación puede apoyarse en una serie de cristales.
Aquí tienes algunos de los mejores cristales para las escaras:
La amatista, con su impresionante belleza y su poder legendario, ayuda a calmar, estimular y curar las emociones, la mente y el cuerpo. La piedra curativa por excelencia es apreciada por sus poderosos atributos curativos para la piel, al tiempo que favorece la oxigenación de la sangre y asegura una circulación adecuada.
En el caso de las escaras, la amatista con su color púrpura ayuda a curar hematomas, hinchazones y dolores, por lo que es un excelente elixir para tratar las escaras. Puedes hacerla aún más potente utilizando el Agua de Amatista de Hildegard von Bingen para limpiar los grados afectados, pero sólo hasta los casos de primer grado.
Además, también puedes beber 10 ml de agua de amatista al menos 3 veces al día.
Rodonita + Mookaíta
La siguiente es la poderosa combinación de rodonita y mookaíta. La rodonita es una hermosa piedra rosa que resuena con el chakra del corazón, mientras que la mookaíta presenta una belleza terrenal con la ardiente fusión de energías amarillas y rojas.
Ambas piedras son poderosas herramientas para fortalecer el cuerpo y mejorar la circulación por todo el organismo. No sólo eso, sino que también ayudan a purificar el cuerpo y a eliminar las toxinas.
Como cristales que ayudan a estimular la cicatrización de las heridas, tanto la rodonita como la mookaíta estimulan el proceso de cicatrización de las escaras. Sin embargo, ten en cuenta que cualquier herida abierta, como las escaras de tercer grado, debe limpiarse adecuadamente durante el proceso.
Puedes colocar el dúo de rodonita y mookaíta en tu mesilla de noche o entre el colchón y el somier. Además, puedes colocar estas piedras en las zonas afectadas para beneficiarte de sus energías vibratorias.
Esmeralda
Ahora, para las escaras de tercer grado, la esmeralda es la piedra perfecta para aliviar el dolor mientras estimula el proceso de cicatrización. Representando un exuberante tono verde, la esmeralda simboliza el crecimiento y la renovación, además de aportar curación, especialmente para las irritaciones y afecciones de la piel.
Además, sus tonos verdes y sus poderosas energías vibratorias pueden ayudar como complemento si los huesos ya están afectados. Esto se debe a que ayuda a aliviar la inflamación de la médula ósea y a calmar el dolor insoportable.
Puedes colocar la esmeralda alrededor de tu cama mientras te tumbas o colocarla entre el colchón y el somier. Aparte de eso, también puedes llevarla como collar o pulsera, siempre que no aumente los riesgos de crear más escaras o problemas de postura al tumbarse.
Pero probablemente la forma más sencilla de utilizar el cristal de esmeralda es tomar de 3 a 7 gotas de esencia de gema de esmeralda 3 veces al día o tomar sorbos de agua de gema a lo largo del día.
Cuarzo Rosa + Granate Piropo + Cornalina
El poder de la cornalina, el granate piropo y el cuarzo rosa ayuda a mejorar la circulación sanguínea en la zona afectada y a purificarla al mismo tiempo. Por lo tanto, este trío de cristales es excelente para reducir el riesgo de escaras.
Sin embargo, ten en cuenta que no deben utilizarse en casos de aumento de temperatura o si ya hay una infección presente, ya que podría tener un efecto contradictorio. Colócalos cerca de tu cama o aplícalos directamente sobre la zona afectada para la curación de las escaras.
Reflexiones finales
Así que ahí lo tienes. Los cristales curativos son de hecho un poderoso aliado para curar las escaras. Sin embargo, si deseas ver resultados efectivos y rápidos, necesitarás otras técnicas probadas, como el alivio constante de la presión, el ejercicio físico real y el cambio de posición al tumbarse cada 2 horas.
Además, dependiendo de las zonas del cuerpo afectadas, se pueden colocar anillos de goma especiales llenos de aire en la cama junto con el uso de colchones especiales. Además, las sábanas deben estar libres de arrugas y ser suaves, así como tener un cuidado adecuado de la piel.
Además, el consumo frecuente de agua limpia para la desintoxicación, una dieta equilibrada rica en enzimas y vitaminas y, sobre todo, la asistencia médica profesional, especialmente para las escaras de segundo grado o más, pueden ayudar a combatir y tratar las escaras en poco tiempo.
Cristales para sanar escaras:
– Amatista: Alivia, estimula y sana emociones, mente y cuerpo. Apoya la oxigenación y circulación sanguínea. Ayuda a sanar hematomas, hinchazones y dolor.
– Rodonita + Mookaite: Fortalecen el cuerpo, mejoran la circulación, purifican y eliminan toxinas. Estimulan la curación de escaras en heridas abiertas.
– Esmeralda: Alivia el dolor y estimula la curación. Ayuda a aliviar la inflamación de la médula ósea.
– Cuarzo rosa + Granate piropo + Cornalina: Mejoran la circulación sanguínea y purifican el área afectada. Reducen el riesgo de escaras.
